Crónicas y cuentos de pueblo
Roque Román Anzola ha querido inculcar y, acrecentar el sentimiento de piriteñidad a su familia, discípulos y a todos los que comparten con él, espacio y tiempo. Pretende consolidar los cimientos principios sociales, psicológicos y genéticos de esta población portugueseña, desde la etimología de su nombre hasta el origen de sus apellidos; desde la textura de sus suelos hasta la pureza de sus aguas, paulatinamente, despacio, como sus pasos de tres cuartos de siglo donde ha escudriñado saberes, misterios, amores y riquezas del terruño.