Gente íngrima
La tensión poética de Gente íngrima atraviesa todo el relato. En el habla castellana de Hispanoamérica se conoce la expresión “íngrimo y solo”, ambas palabras significan casi lo mismo, pero juntas en una sola frase, expresan el colmo de la soledad. El yo poético de Adhely Rivero absorbe la vida interior del gallero, el gallo, las calles solitarias de Arismendi en plena canícula del mediodía y la derrota final en Barquisimeto, donde hay más cosas, pero también mayor soledad para Don Elieche, quien, vencido por los años, termina con dos gallos enjaulados por toda compañía.
Carlos Rojas Malpica
Este volumen poético del autor nacido en Guadarrama, Arismendi, estado Barinas, es un recorrido por la memoria de la soledad, por la intemperie que consiste en estar solo con la mirada de un animal al acecho, el que espuelea y picotea costados y cabeza de su adversario, mientras él también recibe puñaladas en el cuello hasta caer muerto, el uno o el otro y también sus dueños.
Alberto Hernández.